Muere a los 73 años, la primera esposa de Donald Trump, Ivana Trump


EUA.- Este jueves falleció a los 73 años, la primera esposa del ex presidente de Estados Unidos Donald Trump, Ivana Trump, en su domicilio ubicado en Manhattan, Nueva York.

Este día los servicios de urgencias de Manhattan acudieron a una llamada de auxilio en el apartamento del Upper East Side, donde vivía, lamentablemente ya había fallecido la mujer a causa de un paro cardíaco, según un portavoz de los bomberos de Nueva York.

Ivana Trump estuvo casada con Donald Trump entre 1977 y 1992, y durante ese tiempo fue decisiva en la construcción de su imperio inmobiliario. La pareja, que fue sinónimo del poder en una época (los años ochenta) y una ciudad (Nueva York) obsesionados con acumularlo y exhibirlo impúdicamente, se divorció mucho antes de que Trump, entonces un polémico y excesivo magnate, entrara en política. Es madre de tres de sus hijos, Donald Jr., Ivanka y Eric Trump.

Estos la definieron en un comunicado como “una superviviente” y como “una mujer increíble: una fuerza en los negocios, una atleta de clase mundial, una belleza radiante y una madre y amiga cariñosa”. “Huyó del comunismo y se echó en brazos de este país. Enseñó a sus hijos sobre la dureza, la compasión y la determinación”, continúa el comunicado familiar. “Su madre, sus tres hijos y sus diez nietos la extrañarán mucho”.

En una reacción publicada en su plataforma Truth Social, el ex mandatario norteamericano recordó a Ivana cómo una mujer maravillosa, hermosa y sorprendente, que llevó una vida grandiosa e inspiradora”. “Su orgullo y alegría eran sus tres hijos, Donald Jr., Ivanka y Eric. Estaba tan orgullosa de ellos, como todos lo estábamos de ella. ¡Descansa en paz, Ivana!”, escribió.

Ivana Trump, nacida Zelníčková, huyó de la actual República Checa (entonces, Checoslovaquia) en tiempos de comunismo (lo logró gracias al matrimonio con un amigo austriaco). Tras unos años en Canadá, donde trabajó como modelo, aterrizó en el Nueva York de los setenta, en plena era disco. Encontró la fama como personalidad de la alta sociedad de Manhattan y conoció a Trump en 1976. Al año siguiente se casaron.

Ejerció como ejecutiva de los negocios de su marido. Célebre por su dedicación al trabajo, fue vicepresidenta de diseño de interiores de la compañía, llevó personalmente el hotel Plaza, en Nueva York, y colaboró en algunos de sus proyectos más emblemáticos, como la torre Trump en Manhattan y el casino Trump Taj Mahal en Atlantic City, Nueva Jersey.

El divorcio, tan sonado como era de esperar, llegó en 1992, después de que Trump conociera a la que sería su segunda esposa, Marla Maples. En el segundo acto de su vida, Ivana diseñó ropa, joyería y productos de belleza, mantuvo una columna en la que daba consejos a los lectores del Globe y continuó invirtiendo con fortuna en bienes raíces. También participó en programas de telerrealidad, hizo apariciones en películas El club de las primeras esposas (1996), escribió libros de autoayuda ―Lo mejor está por venir: Cómo hacer frente al divorcio y disfrutar de la vida otra vez (1995)―, y plasmó las memorias de sus años junto a Trump en Raising Trump (2017).

Con información de El País

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