Cozumel.- Una entramada red de trata de personas podría estar en operación en Cozumel y Playa del Carmen, donde los tratantes utilizan a adolescentes para “enganchar” a jovencitas de la isla, según denunció una de las madres que a tiempo evitó que su hija fuera “comercializada” en la parte continental.
Hasta este medio de comunicación acudió la señora Guadalupe Zetina Bacab para hacer una advertencia a los padres de familia que dejan que sus hijos e hijas utilicen las redes sociales para “conocer” a otros chichos y chicas, pues a su menor hija de 12 años la contactó un adolescente de 14 años que reside en Playa del Carmen.
“Mi hija aceptó la solicitud de amistad de un muchacho de Playa, entonces ella lo aceptó como si fuera una amistad, de allá se fue dando la conversación. De hecho, el sábado iba a suceder algo que muchas madres no quisieran que sucediera; hago el llamado a la ciudadanía para que tengan un poco de conciencia de lo que pasa”, enfatizó a varios reporteros que cubrieron la denuncia pública.
La también madre soltera especificó que el método de operación de esta organizada banda de tratantes de blancas es que el adolescente invitó a su hija a que fuera a Playa del Carmen y él la esperaría en el muelle de Cozumel para que se conocieran físicamente, pero la astuta mamá evitó que la menor saliera de la casa.
“Empezó mi hija como a las 6:00 de la tarde (del sábado) se me iba a ir, era muy lamentable lo que iba a pasar; cuando yo la quise rescatar, el muchacho huyó y ya no lo pude alcanzar porque me taparon el paso dos personas grandes, entonces ya no pude hacer nada y es que fui a presentar la demanda sobre este caso”. Lamentó que la autoridad competente, la Fiscalía contra delitos sexuales y trata de personas, no le hicieran caso, por eso es que acudió a los medios de comunicación. Reafirmó que su hija tiene 12 años y el joven que se la quería llevar a Playa para entregarla ahí, tiene aproximadamente 14 años.
La atribulada mujer hizo un llamado a los padres de familia para que tengan cuidado con sus hijas, porque sería lamentable que en Cozumel desapareciera una adolescente. Porque su hija no le dijo nada, pero como ya había un antecedente que le enviaban pornografía por un compañero de su escuela, pues estaba pendiente de su celular.
“A ella le mandaron la solicitud de amistad por Facebook, lo aceptó porque vio que era un jovencito, de ahí siguieron conversando, el sábado se iba a ir con él sin saber el riesgo que podía correr”, detalló.