En su conferencia “mañanera” de este jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo haber sido enterado del asesinato de Ignacio Sánchez Cordero, ex secretario de Desarrollo Social y aspirante a la Presidencia Municipal de Puerto Morelos, señalando que existe una línea de investigación hacia el crimen organizado y que el caso ya se está tratando.
Según el presidente, uno de los adversarios -sin dar nombres- de “Nacho” Sánchez en la competencia por la candidatura a la Alcaldía de Puerto Morelos habría recibido recursos del crimen organizado, presuntamente para financiar su campaña y obtener privilegios de ganar éste, pero al ver que Sánchez Cordero lo aventajaba se quejó con sus patrocinadores que sería un obstáculo para cumplir el propósito.
“Al no ser beneficiado -explicó AMLO- habría comentado a este grupo delictivo que ‘Nacho’ Sánchez dificultaría su llegada a la Presidencia Municipal, siendo este comentario el que detonó la ejecución del hoy fallecido y con muy altas probabilidades de ganar la elección”.
Aseguró que cuando hay elecciones se unen grupos delictivos y delincuentes de “cuello blanco” para financiar campañas de ciertos candidatos a cargos populares, ya que “quieren tener control en municipios y estados”.
“Algunos candidatos recibían dinero de la delincuencia para que en caso de ganar en un Ayuntamiento permitieran imponer al secretario de Seguridad Pública, pero luego escalaron a la Dirección de Obras Públicas y ya de plano al presidente municipal (lo tenían) a sus órdenes”, dijo el presidente.
“Aquellas células delictivas les imponían cuotas, que de no cumplirse el pago, eran amenazados de muerte o simplemente los asesinaban”, explicó poniendo el dedo en la llaga.