Othón P. Blanco. – De acuerdo a información publicada por RadiografÍa Quintana Roo, en los últimos días pobladores de la comunidad han señalado el abuso de poder con el que servidores y ex funcionarios públicos se han adueñado de parte de las tierras en la zona costera.
Ante esta situación han levantado la voz para exigir que los abusivos personajes devuelvan lo que le han quitado al pueblo aprovechándose de su condición económica.
Entre las personas señaladas, se encuentra el prófugo ex alcalde de Othón P. Blanco, Eduardo Espinosa Abuxapqui, quien es dueño de un predio de dos hectáreas ubicado a unos pasos de la laguna, no conforme con ello, invadió parte de una calle al grado de reducirla a un carril donde los vehículos tienen que maniobrar o dar reversa para pasar.
De acuerdo con los habitantes, la propiedad se encuentra a espaldas de la planta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en la carretera federal y abarca hasta la calle costera que colinda con la laguna. Su extensión, ubicación y descuido provoca afectación a las familias que viven en los alrededores porque se ha convertido en guarida de malvivientes y alimañas.
Así mismo, en días pasados los habitantes lograron la demolición completa de una barda que invadía el área federal e impedía el libre transito propiedad de Enrique Arámbula Arámbula, Notario Público Número 31 de Felipe Carrillo Puerto, quien intentó sorprenderlos con el argumento que paga concesión por esa franja federal, pero fue desmentido categóricamente.
Otro de los invasores es el doctor Tarquinio José Ortega, quien a diferencia de los demás, el se comprometió a liberar la zona de la que se decía legitimo dueño.
Los pobladores dijeron que personajes de este tipo que se han aprovechado de la ignorancia de la gente para apoderarse de los recursos del pueblo, «pero en Xul Há no nos vamos a dejar, ya hicimos el trabajo de las instituciones de defender nuestro territorio ya que ellas se han vuelto recaudadoras y seguiremos liberando los accesos para que nuestros hijos no vivan lo que pasa en Bacalar, que solo desde lejos pueden ver la laguna, para disfrutarla tienen que pagar, todas son propiedades de ricos y políticos”.
La delegación con apoyo de los pobladores, está recuperando los accesos a la Laguna, porque funcionarios, notarios y ricos de otros lugares, invadieron los terruños impidiendo el paso a los ciudadanos y el acceso al cuerpo de agua que hasta hace algunos años podían disfrutar gratuitamente.
En total son seis accesos, uno de los cuales ya tiraron la barda y los demás están por recuperarlos.
