Por Pedro Canché
Jorge Arturo Sanen Cervantes, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política de la Legislatura 18, tiene que encumbrarse por sus propios méritos. Dejar que los verdes lo guíen, será un error en el arranque de su carrera política.
Tiene que despegarse de Renán Sánchez Tajonar o será succionado en su liderazgo.
Remberto Estrada fue un líder verde, Gustavo Miranda, otro. Para el verde son desechables. Hoy no están ni tienen voz y voto en los alcances políticos del verde. Jorge Emilio González, “El niño verde”, los usa como gerente de sus acuerdos políticos y luego los jubila prematuramente. No les da carrera política.
Ese mismo destino tendrán Renán Sánchez Tajonar y Pablo Bustamante y los demás.
De ahí que Sanen no debe poner a Tajonar como su gurú político, menos a su tocayo Jorge Emilio, el jeque de Quintana Roo encumbrado por Andrés Manuel López Obrador desde su oficio de rémora de presidentes en turno…
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Isabel Arvide siendo Isabel Arvide, a fuerza quería que los asistentes al grito de independencia escuchen una biografía de ella, de ella y solo ella. Nombrada cónsul en Estambul por el López…
Afortunadamente ya terminó su rol de cónsul. Al irse López Obrador, también se va.
Esos son los amigos de AMLO, Jorge Emilio y Arvide, por mencionar 2 de cientos que lo acompañaron en su gabinete en el sexenio en el que se esfumó la República.
