Chetumal.- La Unión Nacional de Asociaciones de Ingenieros (UNAI) dio a conocer que presentó un proyecto al Ayuntamiento de Othón P. Blanco para resolver el manejo de los residuos, uno de los problemas que ha aquejado a la actual administración, el cual incluye crear un combustible que usa la industria cementera. Además, dieron un adelanto de otra propuesta que tienen, que es pedir la concesión al gobierno estatal para aprovechar el sargazo y generar etanol.
“Actualmente lo que requerimos es que ya haya una solución (al sargazo). Fueron 14 proyectos los que nos presentaron en México, en una reunión temática sobre sargazo; decidimos tres, que estuvieran mañana a las 11 aquí, en la Cámara Mexicana de la industria de la Construcción; el objetivo es solicitarle al gobierno estatal que nos dé la concesión a empresarios para usar al sargazo para producir etanol”, reveló en rueda de prensa Eduardo Sánchez Anaya, presidente de la UNAI.
Adelantó que mañana se presentará a detalle esta propuesta.
RESOLVER PROBLEMA DE BASURA EN OPB
Por su parte Abel Duarte Ortega, director general de Fadim SA de CV, empresa que se dedica a cuestiones ambientales en el país desde hace 34 años, explicó la propuesta que le hacen al ayuntamiento capitalino para el manejo de desechos.
“Hemos incursionado en el mundo del reciclaje todos estos años y últimamente ya hay una preocupación a nivel nacional de manejo de residuos, no solo por los problemas de manejo de impacto ambiental, sino como una fuente de generar actividades productivas; es cuando iniciamos precisamente nuestra propuesta; tenemos 19 años transformando residuos en combustible”, detalló.
Lo que producen es combustible para una cementera, Cementos Cruz Azul, y además trabajan de manera independiente con otras cementeras a nivel internacional.
“En el caso de Othón P. Blanco, hemos hecho el intento a invitación del ingeniero Sánchez Anaya por la gran preocupación y por varios motivos: el primer punto es que los manejos de residuos sólidos son gasto corriente; pagar por enterrar es muy costoso y lacera definitivamente las finanzas públicas y con una repercusión, como limitar las obras que requiere el municipio; otro punto es que los rellenos sanitarios generan un grave impacto ambiental”, señaló.
Indicó en otros países incluso ya se ha dejado de usar los rellenos sanitarios, porque además se sabe que muchas veces no se operan como debiera, pero en México se siguen utilizando. A los problemas de lixiviados y demás, se les debe añadir, externó, que en Quintana Roo prácticamente “se flota” sobre cuerpos de agua, a los que hay que cuidar.
Dentro de las sustancias más delicadas con las que se trata, están los metales pesados que vienen de productos industrializados, y el peor error que se comete es enterrarlos, pues
“esto nos va a condenar a vivir por décadas a este foco explosivo de contaminantes”.
En contraste, destacan la valía de la propuesta que tienen para la Comuna capitalina.
“Tenemos requerimientos de materia prima altamente competitiva para la industria que nos permite reincorporar residuos y no enterrarlos; podemos generar este producto y ofrecerlo para la propia industria hotelera; y lo que ya no puede reutilizarse, puede generar un combustible que a nivel internacional se ha desarrollado de forma importante; es otra posibilidad, es un energético que no depende de los vaivenes de la economía”, subrayó.
Concluyó diciendo que además es una alternativa económica, pues la industria cementara es una de las más caras comparadas con las de otros países por la alta dependencia que se tiene a los hidrocarburos.