Miente el alcalde de Progreso: él le dio permiso al Mocambo para funcionar.
Aconsejado por su asesor borgista Lino Magos, el presidente municipal del puerto, Julián Zacarías Curi, aseguró en un comunicado oficial que el restaurante donde ocurrió trágico derrumbe operaba de manera ilegal, pero documentos firmados por el propio alcalde le otorgan la licencia de giro mercantil en 2018, incluso ya le dieron la de este año.
A pesar de que el alcalde de Progreso, Julián Zacarías Curi, aseguró en un boletín que no se le expidió la autorización para funcionar al restaurante bar Mocambo, donde el domingo ocurrió trágico derrumbe, documentos oficiales del ayuntamiento, firmados incluso por el propio funcionario, lo desmienten.
El establecimiento cuenta con licencia del registro de giros mercantiles, industriales y profesionales del catastro del puerto, que tiene la firma de Julián Zacarías Curi, en su calidad de presidente municipal, y de Emilio Javier Góngora Ortegón, director de Finanzas y Tesorería.
También está el comprobante de pago que se hizo por la mencionada licencia en la Dirección de Finanzas y Tesorería, con fecha del 11 de diciembre de 2018.
Aconsejado por su asesor borgista Lino Magos Acevedo, el alcalde emitió un boletín donde trata de deslindar al ayuntamiento progreseño de la tragedia en el restaurante bar Mocambo, que cobró la vida de tres personas, incluyendo una niña, y dejó cinco lesionados.
Sin embargo, la estrategia del jefe de “trolles” y “bots” del borgismo, ahora refugiado en el puerto, fue fallida porque además de revelar información que pone en entredicho a la administración de Zacarías Curi, existen documentos donde se desmienten algunas de esas afirmaciones, pues la licencia de uso de suelo y funcionamiento le fueron otorgadas al responsable del Mocambo, Carlos Baeza Manzanero, en la actual administración municipal, y ya se le renovaron las de 2019.
La licencia ya fue solicitada y autorizada, pero aún no ha sido recogida por el solicitante, nos informan. También cuenta con licencia sanitaria vigente, emitida por la Secretaría de Salud de Yucatán.
Zacarías Curi sabía del funcionamiento del establecimiento, incluso fue invitado de honor en su reinauguración, como consta en fotografías y reseñas del evento, pero ahora a sabiendas de su responsabilidad en el trágico accidente, trata de zafarse pero más se hunde ante los fallidos consejos de su “superasesor”, quien fue responsable en Quintana Roo de varios atropellos contra periodistas críticos del régimen borgista.
Por cierto, Baeza Manzanero es solo ocupante del edificio donde ocurrió el trágico derrumbe, pues el dueño es el hijo del conocido cantinero de Progreso, Manuel Perera “Rábano”, quien murió en 2017.
El hijo del fallecido heredó el local y se lo rentó a Baeza Manzanero, para que opere ahí el Mocambo con una nueva administración.
Mediante un representante legal, el empresario ya se puso en contacto con la familia del panadero progreseño fallecido en el accidente, a fin de llegar a un acuerdo sobre la indemnización a la viuda.
A Lino Magos, asesor del alcalde de Progreso, Julián Zacarías Curi, le gustaba tomarse fotos con los priistas Roberto Borge y Enrique Peña Nieto. Foto: Noticaribe
Ahora bien, habría también que cuestionar qué tan real es la información que difunde el boletín sobre los “aproximadamente 328 comercios dedicados a la venta de licor, de los cuales únicamente 40 han acudido a la invitación de regularizarse”.
La Canirac ya informó que en Progreso sus socios son aproximadamente unos 20, en los cuales no se incluye el Mocambo, y todos cumplen con los requisitos establecidos en la ley.
El comunicado elaborado por el asesor borgista remata con una advertencia que en honor a la verdad debería aplicarse a varios funcionarios de Progreso, incluyendo el alcalde: “En caso de comprobarse conforme a las investigaciones en curso responsabilidad de servidores públicos en funciones o de administraciones anteriores, se procederá con todo el rigor de la Ley conforme el caso lo amerite”.
Con informaciónn de : AlmomentoNoticiasProgresoRelevante