posesionarios

Gustavo,Samuel y Osvaldo, los nombres detrás del despojo de tierra, en Bacalar

 

Por Guillermo Miranda
Bacalar.- Los terrenos a orillas de la Laguna de Bacalar, que día a día crece y se fortalece su actividad turística han despertado la ambición de desarrolladores, oportunistas, funcionarios municipales y hasta de particulares posesionarios de supuestos terrenos nacionales, a tal grado que parta donde se incline el dinero y el poder se actúa, aun cuando la autoridad sabe y conoce a quién le asiste la razón en diversos predios en disputa.
Todo salió a la luz pública con el desalojo que se hizo de un predio conocido como Rancho Monte Águila, que supuestamente forma parte del Área Nacional Protegida, mismo que se efectuó la tarde del 22 de febrero por la autoridad municipal en cumplimiento de un ordenamiento jurídico, tras judicializarse una denuncia de despojo en la Fiscalía General del Estado.
La orden de desalojo está a favor de Gustavo Rodríguez Elizarrarás, presidente de la asociación Selva y Laguna bacalar, A. C, quién reclama la invasión de la fracción 3 de 5 Hermanos, orquestada presuntamente por Samuel Aguilar y Celso Catzin en dos ocasiones: julio de 2018 y enero de 2011 supuestamente por la fuerza y con armas de fuego que expulsaron a los investigadores y biólogos de esta zona protegida.
La propia autoridad informó que el predio de 70 hectáreas fue desalojado y en el operativo se detuvieron a cinco personas y el decomiso de dos rifles y cartuchos calibre .12 y .22 mm, armas punzocortantes y equipo de labranza, aun cuando alegaron tener la legítima posesión y mostraron documentos que avalan su posesión de 174 hectáreas.
La versión de la autoridad es que el terreno, ubicado a orillas de la laguna de Bacalar y que está dedicado a trabajos de investigación y preservación de ecosistemas había sido invadido por segunda ocasión desde principios de febrero pasado por un grupo de unas 40 personas, con armas largas, y dos camiones, quienes desalojaron a los investigadores e instalaron un campamento en forma irregular.
La versión de Samuel Huicab Aguilar y Celso Catzin.
Al respecto Celso Catzin uno de los ocupantes de los predios en disputa, primero aclaró que ni son paramilitares ni tienen armas de grueso calibre, sino que son campesinos que tienen rifles para la caza.
Señaló que el pleito por este terreno se originó debido a que una ciudadana de Francia compró parte del terreno denominado “5 hermanos” y de manera astuta el vendedor le dio otras colindancias que mediante la corrupción está afectando 70 de las 174 hectáreas que pertenecen a Rancho Monte Águila.
Denunció que es tal la corrupción, que los tres órdenes de gobierno se coludieron con la francesa para instrumentar el desalojo que ocurrió el 22 de febrero de 2019, aun cuando el posesionario original, Osvaldo Morales Correa, le vende a Samuel Huicab Aguilar, quien solicitó de manera oficial ante la SEDATU el terreno y le otorgaron 174 hectáreas desde el 2014.
Versión de Gustavo Rodríguez
Según lo publicado en Grupo Pirámide, Rodríguez Elizarrarás señala que ha trabajado toda una vida para adquirir el sueño de su vida: un terreno para un proyecto sustentable a la orilla de una de las lagunas más hermosas del mundo en Bacalar.
“Los delincuentes viven en la total impunidad porque saben que, por incapacidad, corrupción o exceso de trabajo, la justicia no actúa. Las víctimas que somos gente pacífica, con reconocimiento desde hace casi 40 años”, agrega.
Rodríguez Elizarrarás señaló a grupo Pirámide que son suyos los predios en disputa desde 1990, sin embargo miente totalmente, pues según el Registro Público de la Propiedad y el Comercio, la compra venta de las fracciones del entonces terreno denominado 5 hermanos inició en 1999 con el registro de la fracción 4 a favor de Fernando Betanzos Tenorio y María del Carmen Betanzos Tenorio bajo la escritura número 29431 folio 55 tomo CCCL a fojas 156 a 159 de fecha 22 de noviembre de 1999.
Según el Ayuntamiento de Bacalar en Oficio MB/TM/DC/242/2018 en contestación a solicitud de la SEDATU de abril del mismo año y firmada por Fredy Marrufo Martín, existe un traslape, es decir las 174 hectáreas del terreno denominado Monte Águila están técnicamente montadas en solo 50 hectáreas de la fracción 3 de 5 Hermanos y propiedad de Gustavo Rodríguez Elizarrarás, según el Registro Público de la Propiedad y el Comercio de fecha 23 de enero de 2009 según escritura número 2955 y folio 99184.
Der acuerdo a las coordenadas estipuladas en la autorización de la SEMARNAT que declaró Área Nacional Protegida el predio fracción 3 de 5 Hermanos a solicitud de Gustavo Rodríguez Elizarrarás (copia en poder de Noticias Chetumal), no tiene colindancia a la Laguna de Bacalar ni tampoco cuenta con acceso hacia la carretera federal, ya que de acuerdo a la imagen satelital dicho terreno se encuentra a cuatro hectáreas de la colindancia con el Ejido Buenavista, es decir, actualmente de acuerdo a la reja puesta, invade parte del predio de Monte Águila.
La historia del predio 5 Hermanos, parte de la disputa
“5 Hermanos” era un terreno nacional de 363.4 hectáreas y que en sociedad la fracción tercera -69.9 hectáreas y el pedazo de predio -104 hectáreas- colindante con el ejido Buenavista –sin propietario-llenaron de codicia a Osvaldo Morales Correa y a Gustavo Rodríguez quienes se hicieron socios ahí por el año de 1999 y empezaron a planear el usufructo de la misma, incluso que los llevó a talar de manera ilegal diversas especies maderables de la zona.
En la investigación hecha por Noticias Chetumal, Osvaldo Morales Correa rompe la sociedad con Gustavo Rodríguez desde el 2005, cuando se da cuenta que éste decidió titular a su nombre la fracción tercera del predio 5 Hermanos, por lo que sin dinero busca quedarse con las 100 hectáreas –lote vacío en terrenos nacionales- y ahí es donde se contacta con Samuel Huicab Aguilar en 2013, dedicado a comprar predios para cerrar madera.
Aun cuando Gustavo Rodríguez señaló a Grupo Pirámide que hay grandes corporaciones que quieren poner hoteles de muchas estrellas y muchos pisos y destrozar un ecosistema que es demasiado frágil – el de la Laguna de Bacalar- y por ello apropiarse de “Huub’ Sak”, no aclaró que solo es propietario de 70 hectáreas que donó para que fueran convertidas en Área Nacional Protegida, según el certificado de la CONANP 236/2010, es decir, un año después de que lo tituló a su nombre según consta en el Registro Público de la Propiedad y el Comercio.
Osvaldo Morales Correa y sus engaños
Debido a que ahora Osvaldo Morales Correa observó que Gustavo Rodríguez mandó a cercar no solo la fracción 3 del predio 5 Hermanos de su propiedad -70 hectáreas- sino también las 100.4 hectáreas más, por ello desde 2014 hace tratos con Samuel Huicab Aguilar, quien inicia el trámite ante SEDATU para que le asignen 174 hectáreas del predio Monte Águila, por lo cual le asignan número de folio a su solicitud y toma posesión del predio.
Sin embargo el 24 de julio del 2017, tramitó un amparo ante el Juzgado Sexto de Distrito, en Chetumal, contra todas las autoridades, donde aportó como testigos a varias personas para que la autoridad le diera posesión final de 174 hectáreas en el predio denominado Monte Águila, engañando al juez federal, ya que el predio sin ocupar solo es de 100.4 hectáreas comprendidas desde la Zona Marítima Federal hasta la Carretera Chetumal-Bacalar y de su colindancia con el predio fracción 3 de 5 Hermanos hasta el Ejido Buenavista.
Tanto el trámite hecho por Osvaldo Morales en SEDATU como el hecho por Gustavo Rodríguez ante SEMARNAT, tienen imprecisiones y solo reflejan la ambición desmedida de ambos sujetos, ya de la tercera edad, por quedarse con ese predio cuya colindancia a la Laguna de Bacalar es envidiable.
Gustavo Rodríguez tuvo que acudir ante la Fiscalía General del Estado para denunciar que alrededor 50 individuos armados corrieron al vigilante a punta de pistolas y armas largas el 26 de julio de 2017 y le asignaron la carpeta FGE/QR/BA/07/507/2017, que procedió lentamente hasta que el 22 de febrero se ejecutó el desalojo a cargo de policías municipales de Bacalar.
En un video en poder de Noticias Chetumal, durante el desalojo la Policía Municipal no presentó ninguna orden, por ello se observa la resistencia de los ocupantes encabezado por Samuel Huicab, quien posteriormente fue detenido en Bacalar en el tramo conocido como libramiento por supuestas faltas administrativas y quedó en libertad por falta de pruebas 10 horas más tarde.
Quien aún permanece detenido es Osvaldo Morales de 82 años, quien también fue apresado en Bacalar cuando iba a entrar a su domicilio por el delito de daños en propiedad ajena, al aventar una piedra a la patrulla y romperle los cristales, según la explicación que diario a sus familiares, al momento de ser ingresado al CERESO de Chetumal, versión que confirmó el personal de la Fiscalía General del Estado a Noticias Chetumal.
Versión de la segunda invasión
En abril del año de 2018, mientras la delegación de la SEMARNAT solicitaba información al Ayuntamiento de Bacalar y al Registro Público de la Propiedad y el Comercio sobre las 174 hectáreas supuestamente terrenos nacionales superficie sin dueño, ante la solicitud que se hizo en la Reforma Agraria y en esa instancia de gobierno Osvaldo Morales ordenó con Samuel Huicab ingresar nuevamente al predio Monte Águila con un grupo de trabajadores armados con rifles, apoderándose de igual forma de la fracción 3 de 5 Hermanos, aunque en la denuncia Gustavo Rodríguez de manera maliciosa señaló que habían invadido también las fracciones 2 y 4, ya que la 3 estaba resguardada por un séquito de guardias privados.
Aun la Secretaría de Desarrollo Agrario y Territorial y Urbano (SEDATU) no da su anuencia sobre la solicitud de posesión de las 174 hectáreas de Monte Águila, debido a que está sobre el predio fracción 3 de 5 Hermanos propiedad de Gustavo Rodríguez y que ahora es un Área Nacional Protegida, pero a aprovechándose de la lentitud de la ley, Samuel Huicab llevó a sus trabajadores a limpiar dicho predio.
“Yo tengo la documentación y no pueden reclamarse estos terrenos como nacionales”, dijo a Grupo Pirámide Gustavo Rodríguez e informó que quien se presentó en diciembre de 2018 a los terrenos fue Samuel Aguilar, que le explicó que quien le cedió los derechos de Monte Águila es Osvaldo Morales. “Yo mismo le dije que eso no tenía valor, porque los terrenos no son nacionales”, recordó.
Es decir Gustavo Rodríguez reconoce la existencia de 100.4 hectáreas de terrenos nacionales denominada la extensión Monte Águila.
Lo que indica el satélite
Noticias Chetumal consultó con un topógrafo, que durante 20 años laboró en la dirección de Catastro del Gobierno del Estado, quien certifica que existe un traslape, tal y como lo reconoce el propio Ayuntamiento de Bacalar, ya que al ingresar las coordenadas geográficas del predio Fracción 3 de 5 Hermanos ahora ANP las 70 hectáreas se ubican claramente dentro de la superficie de Monte Águila, y no tiene ni salida a la Laguna de Bacalar ni a la carretera Federal Chetumal- Carrillo Puerto.
Asimismo existe una extensión de aproximadamente 100 hectáreas que no tienen dueño, es decir, aparecen como terrenos nacionales según la cartografía de la Reforma Agraria consultada vía satélite, por lo que es evidente que tanto Osvaldo Morales (representado por Samuel Huicab) como Gustavo Rodríguez quieren apropiarse de tierra que no les corresponde.
Ayuntamiento parcial
El ayuntamiento de Bacalar que encabeza Alexander Zetina Aguiluz sabe desde abril de 2018 del conflicto de intereses en estas tierras y de manera tramposa cobró los derechos en la Zona Marítimo Terrestre a Osvaldo Huicab por la colindancia de 174 hectáreas con la Laguna de Bacalar, y al mismo tiempo avaló el desalojo vía Seguridad Pública Municipal por este total de tierras presuntamente invadidas, cuando debió ordenar que quedasen libres las 70 hectáreas de la Fracción 3 de 5 Hermanos propiedad de Gustavo Rodríguez.
Lo extraño de todo este caso es el hostigamiento de parte de elementos de Seguridad Pública Municipal contra Samuel Huicab que sin mediar falta administrativa alguna (exceso de velocidad, manejar ebrio o bajo influjo de enervantes, placas o documentos irregulares, etc) le fue retenido su vehículo un carro tipo chevy en las calles de Bacalar.
Seguridad Pública reguarda las 174 hectáreas
Pese a que ya se judicializó el proceso de la denuncia por el delito de despojo y amenazas y lo que se acumule, la Fiscalía General del Estado solo pidió el auxilio de la Policía Municipal de Bacalar para desalojar la Fracción 3 de 5 Hermanos donde se ubica la APN, pero de manera irregular y con alguna intención (que según Samuel Huicab denuncia dinero sucio y corrupción) Seguridad Pública Municipal resguarda las 174 hectáreas y ha decomisado vehículos y armas de cacería de los trabajadores – no invasores-, de los campesinos, no paramilitares que ahí se encontraban y que fueron sacados hace ya tres días.
En este sentido la omisión de información por parte de Catastro Municipal del Ayuntamiento de Bacalar es clave, ya que saben exactamente de donde a donde debe operarse el desalojo – de las 70 hectáreas Fracción 3 de 5 Hermanos- y no de todo el predio de 174 hectáreas que indebida y mañosamente mandó a cercar Gustavo Rodríguez, supuestamente para hacer un desarrollo turístico con una ciudadana originaria de Francia aprovechando la colindancia de Monte Águila con la Laguna de Bacalar y que no tiene su ANP.
¿Quién está detrás de Samuel Huicab?
Para Gustavo Rodríguez aparentemente hay dos personas: José Ramón Martínez López y Gabriel Soto Pozos; que están vinculados al ex gobernador y hoy presidiario Roberto Borge Angulo, por el modo de operar y que así fraguaron numerosos casos de invasiones en el municipio de Tulum, apoyados por SEDATU y la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, según denunció a Grupo Pirámide el propio Gustavo Rodríguez.
Sin embargo quien acusa está obligado a probar su dicho y en la investigación hecha por Noticias Chetumal la única vinculación de José Ramón Martínez López y Gabriel Soto Pozos es que ambos aparecen como propietarios de una facción de 5 Hermanos según Catastro Municipal de Bacalar.
Gaspar Amelio Rosado Gamboa en abril de 2018, como Director de Catastro Municipal de Bacalar señala que en la revisión echa existe el predio fracción inscrito en el Registro Público de la Propiedad y el Comercio a nombre de José Ramón Martínez López y Gabriel Soto Pozos, bajo folio 27-39 del Tomo XXIX-A fojas 37 y 38, con fecha 6 de junio de 2011, es decir, exactamente dos meses y un día después de que tomara posesión como gobernador Roberto Borge Angulo.
¿Quién tiene la razón?
Finalmente deben ser las autoridades Reforma Agraria y la SEDATU, la SEMARNAT por el tema de la fracción 3 convertida en APN y el ayuntamiento de Bacalar a cargo de Alexander Zetina Aguiluz, vía Catastro Municipal, quienes mediante el uso de la tecnología con las coordenadas geográficas hagan una medición exacta de cada fracción del predio 5 Hermanos y decidan si se otorga o no el predio sobrante de 100.4 hectáreas de terrenos nacionales con colindancia a la Laguna de Bacalar, denominado Monte Águila a Osvaldo Morales o simplemente se le niega la posesión y se informa al Poder Judicial de la Federación para resolver el juicio de amparo promovido por éste último por el arrebato de las supuestas 174 hectáreas indebidamente reclamadas.
Lo cierto es que mañosamente a ambos posesionarios, tanto a Gustavo Rodríguez como a Osvaldo Morales, el ayuntamiento de Bacalar cobra anualmente los impuestos como predial, uso de suelo y Zona Marítimo Terrestre tanto por la Fracción 3 de 5 Hermanos –donde está la ANP- como por las 174 hectáreas de Monte Águila aunque esté traslapado.