Por Pedro Canché
El Estado de Quintana Roo, al determinar un juez que UBER puede operar sin la concesión debe poner reglas e impuestos claros en la ley para aprovechar ese mercado y que el erario tengan un pedazo del pastel.
Los impuestos no están claros para el Estado, la transnacional que opera desde los Estados Unidos quizás deje alguito a la Federación pero a los Estados no.
Entonces por ejemplo, las placas podrían cobrárseles a 60 mil pesos con la cobertura y seguro correspondiente para el usuario. De lo contrario no permitir su operación.
Además otros impuestos se pueden crear tal como existen para los patrones el 4 por ciento de nómina y el 5 por ciento para los hoteleros. ¿Por qué no el 5 por ciento para UBER?
Los magistrados han dicho que pueden operar.. pero eso no obsta que el Estado los deje funcionar gratis.
A pagar como todos pues… a trabajar los diputados. Muévase José María Chacón, el diputado de la comisión de transporte de mi chan pueblo.