VIH

900 niños en Pakistán contraen VIH por culpa de un pediatra que reciclaba jeringas para ahorrar

Ciudad de México.- El doctor Muzaffar Ghanghro cobraba 16 rupias pakistaníes por visita, el equivalente a 10 centavos de dólar. Era uno de los pediatras más baratos de la ciudad de Ratodero, en Pakistán, pero sus servicios resultaron carísimos luego de que unos 900 niños fueran contagiados de VIH porque el médico reutilizaba las jeringas.

A principios de este año, un brote de VIH en esa ciudad alertó a las autoridades sobre un foco de infección del virus de inmunodeficiencia humana en la localidad. Ghanghro fue acusado de negligencia médica y homicidio involuntario luego de que varios padres de familia denunciaran las prácticas antihigiénicas y poco éticas del galeno.

Según reporta The New York Times, un padre de familia denunció que durante una consulta de uno de sus hijos con Ghanghro, éste buscó una aguja usada en un bote de basura para atender al niño de seis años; poco después, el menor fue diagnosticado con VIH. El hombre, de nombre Imtiaz Jalbani, aseguró que de sus seis hijos atendidos por el doctor, cuatro dieron positivo por VIH y los dos más pequeños murieron.

El pediatra asegura que es inocente y, como aún no ha sido sentenciado, sigue dando consulta en un hospital público a las afueras de la ciudad.

Las autoridades temen que los 900 niños no sean las únicas víctimas, si bien el consultorio del doctor no es la única fuente del brote de VIH en esta región paquistaní. Muchos de los niños infectados son rechazados por sus compañeros de escuela y por sus amigos.

El número de nuevos casos de VIH en jóvenes mexicanos casi se ha triplicado en los últimos ocho años y, tan sólo en 2018, se reportaron seis mil 274 contagios en personas de entre 15 y 24 años, un 284 por ciento más en comparación con el 2010, alertó el especialista y experto Javier Báez-Villaseñor.

“Llama la atención la percepción pues lo jóvenes le han perdido miedo y respeto a la epidemia”, señaló en entrevista a Efe el doctor Báez-Villaseñor, ex funcionario del Consejo Nacional para la Prevención y el Control del Sida (Conasida).

El especialista señaló que, de acuerdo con un análisis de la base de datos del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH y el Sida (Censida), el grupo de jóvenes de entre 20 y 39 años -considerados como la generación millennial-, representan el 66.6 por ciento de casos de portadores de VIH en México.

Mientras que, según estimaciones de Censida, 35 por ciento de mexicanos con VIH no saben que portan el virus. (Fuente: Sinembargo)

Quintana Roo, en el Top 5 de VIH-Sida

Cancún.- En el mundo hay entre 32 y 40 millones de infectados de VIH-Sida, de los que el 40% lo ignora. En México, hubo 14 mil nuevos casos detectados según cifras oficiales, de los que 300 fueron en Quintana Roo, que como entidad ha estado entre los cinco primeros lugares en los últimos 10 o 15 años. Ante ello especialistas planean generar un proyecto de educación sexual para reducir el número de contagios, evitar que haya más casos.
“La educación sexual es un tema muy importante. El problema que hay que evitar es que nuestros adolescentes se infecten, y quienes ya se infectaron, no infecten a más”, señaló en el marco del evento el doctor Joaquín Lozano Guasch, director de la Clínica de Ojos.
Además, dice el doctor José David Orgaz, asesor de la Fundación “Dame un poco de luz”, que debe considerarse el factor del turismo y de la movilidad de la población, que también inciden de manera importante en que se den los contagios.
“Ya está el grupo de pacientes que son portadores y que debe recibir la atención; de hecho, ya son atendidos con insumos y cantidades adecuadas; aunque hay camino por recorrer, hay excepciones, pero hay quien trabaja”, remarcó.
Pero también hay otra labor, que es evitar que la ciudadanía se contagie, y ahí es donde piensan incidir.
“Objetivamente, hay que concientizar a la gente sobre las enfermedades; se tiene que dar información entendible y la gente tiene que asumir responsabilidades; así como el estado debe tratar a las personas, los ciudadanos deben de tener una información objetiva que describa todas las enfermedades; que sea lo más básico, que sepa de síntomas”, comentó Lozano Guasch.
En resumen, que tanto las personas sean responsables usando protección, que se haga chequeos y que diga a quienes tiene relaciones que tiene algún padecimiento, y no dejarle todo al estado.
“Es llegar a escuelas, empresas y que les den cursos de estas o de cualquier enfermedad; se tienen que hacer corresponsables”, indicó.
Su propuesta radica en formar un comité que permita esta educación sexual, en el que participen sectores público y privado, los tres niveles de gobierno, instituciones de nivel medio y superior, empresarios. Y trabajar de cerca con el sector salud, y que se pueda asignar más presupuesto para difusión.
Reconocen que sí hay trabajo, pero es insuficiente.
Dentro de lo que dicen que falta hacer es involucrar a los padres para que sean ellos quienes se acerquen a los hijos, y hablar de ética, de moral, de responsabilidad y no solo regalar condones.